jueves, 13 de febrero de 2020

DE UNA PERSONA VACÍA

Soy una persona vacía
y lo que soy, seré y siento,
lo absorbo día a día
hasta que me canse,
conozca a otra gente más tronchante
y me dé, por ejemplo,
por llenarme de tatuajes
(aunque los haya odiado toda la vida).
Soy una persona tan vacía,
que cuando se me acabe el jugo de esta partida
sacaré un nuevo avatar
que se comporte como los otros digan.
Soy un huevo de fabergé,
que tras todo el oro y la platería
queda una bolsa de aire
que iré acoplando
a la forma que crea
que los del infierno puedan lanzarme hacia arriba
sin que se cuestionen si lo que soy es auténtico
o made in China.
Me meteré tanto en el papel
que no sabrás si algún día hubo verdad,
en alguna de mis otras vidas,
y quedaremos poco face tu face,
porque se me acaba viendo caspilla y la plantilla;
y yo, ante todo profesionalidad,
que soy una persona vacía, pero soy íntegra.
(o no sé si será eso, esa palabra es de mi época de listilla)
¡Ays...! ¡Es que así la vida es más sencilla!
¡con lo que cuesta evolucionar!
odiar, odiarme y que te odien los demás,
prefiero la opinión de muchos
que el sobreesfuerzo de pensar.
¿Elegir yo por mí
y no lo trending topic? jolín
que así no hay que trabajar,
no hay más que abrir pestaña
¡Y te lo dice todo ahí!
que si lo pone en internet, chicos,
es que es así.
bueno, o no. Espera
Bueno, ya aparecerá otra peña
y me haré una persona vegana
(que allí tengo muchas personas hermanas)
de ultraderecha,
artista,
macrobiótica,
animalista
trapera,
poeta,
cani, jardinera
cantante si me apuras,
o cualquier cosa que la presión social me diga que sea.
Y tranquilos, no sufráis por mí
porque, así como vosotros sufrís porque ¿y si no soy real?
a mí me suda la cona, es decir, me da igual,
yo pa mí y pa mi abuela,
la veri importan pipol person más especial
del mundo mundial. 

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